miércoles, 6 de diciembre de 2017

Preguntas y respuestas Facim: ¿Cómo puedo librarme de los celos?

Pregunta#464: Cómo puedo librarme de ser celosa? Durante años me he mantenido en negación en lo que se refiere a esta emoción. Me he dado cuenta recientemente de que no haré muchos progresos con el Curso de Milagros si no atiendo este asunto. He intentado pedirle perdón a Dios, pero cuando hago eso, en realidad es mi ego quien está hablando y no mi verdadero yo, quien quiera que sea. Mi propia mente-ego me tranquiliza en un falso sentido de seguridad diciéndome que no tengo que hacer nada acerca de los celos. Puedes por favor ayudarme a aplicar el Curso en este asunto?

Respuesta: Tratamos los celos como tratamos a cualquier otra emoción del ego. El primer paso, el cual ya has dado, es reconocer que esa emoción se encuentra ahí. El segundo paso consiste en reconocer que los celos no son en realidad el problema. Como Jesús nos dice al comiendo del libro de ejercicios, "nunca estoy disgustado por la razón que creo" (W.pI.5). Y él va un poco más allá diciendo "Esta idea... puede aplicarse a cualquier persona, situación o acontecimiento que creas que te está causando dolor. Aplícala específicamente a lo que, según tú, es la causa de tu disgusto, y usa, para describir el sentimiento, el término que te parezca más preciso. El disgusto puede manifestarse en forma de miedo, preocupación, depresión, ansiedad, ira, odio, celos o un sinnúmero de otras formas, y cada una de ellas se percibirá como algo diferente. Más no es cierto que sean diferentes. Sin embargo, hasta que aprendas que la forma no importa, cada una de ellas constituirá materia apropiada para los ejercicios de hoy. Aplicar la misma idea a cada una de ellas por separado es el primer paso que te lleva a reconocer finalmente que todas ellas son lo mismo" (W.pI.5.1).

Y entonces acerca de qué estamos enfadados si no es acerca de lo que pensamos que es el problema? Creemos inconscientemente que hemos atacado el amor separándonos de el. Este ataque surgió porque celosamente creímos que Dios tenía lo que nos faltaba y que lo ha estado ocultando de nosotros. La culpa acerca de nuestro ataque es tan insoportable que tuvimos que fabricar un mundo para esconder esa culpa de nosotros mismos. La complejidad del mundo, con todos sus diversos problemas y emociones acompañantes, se vuelve nuestra preocupación, asegurándonos que jamás regresaremos a la verdadera simplicidad del problema, la creencia en la separación en nuestra mente. Aunque no mencionas las formas específicas que tus celos toman, son una expresión del pensamiento de que o bien alguien tiene lo que deseamos o bien que nos lo terminará arrebatando. No es importante cuál sea la expresión específica, se trata siempre del pensamiento de la separación disfrazado, con la responsabilidad de sus consecuencias proyectada afuera de nosotros.
Queremos reconocer los sentimientos de celos, reconociendo lo que ellos representan y cómo son capaces de mantener la sensación de privación y carencia con vida en nuestras mentes, con el doloroso costo que ello supone. Los celos, por supuesto, sirven al propósito del ego de ver la responsabilidad de nuestra carencia existiendo fuera de nosotros mismos, en otros quienes percibimos con el poder de tomar y mantener lo que por derecho nos debería pertenecer. El problema de los celos es entonces atendido retomando la responsabilidad de nuestros sentimientos de miedo y carencia, de regreso a nosotros mismos, dentro de nuestras propias mentes, donde también reside la Respuesta. Solo entonces podemos reconocer que el amor que hemos celosamente intentado ganar y mantener ha sido nuestro siempre, sin necesidad alguna de ir en su búsqueda ni en su defensa.

Link al original aqui