miércoles, 6 de diciembre de 2017

Preguntas y respuestas Facim: Si el mundo no es real, ¿porqué Jesús nos sugiere hacer algo por nuestro hermano?

Pregunta#465: Siempre he entendido que en Un Curso de Milagros Jesús jamás nos pide que hagamos algo en el mundo, salvo que hagamos las lecciones en el Libro de Ejercicios. Entonces, redescubrí en el Capítulo 12: “Reconoce lo que no importa, y si tus hermanos te piden algo 'descabellado', hazlo precisamente porque no importa' (T.12.III.4:1). También he leído la pregunta/respuesta #60. Pero esto no responde porqué él está diciéndonos que “hagamos algo en el mundo.” Si el mundo no existe, porqué tengo que hacer algo que mi hermano quiere que yo haga?


Respuesta: El contexto de esta declaración aparece en los dos párrafos precedentes y es esencial para que nos podamos dar cuenta de que Jesús no está hablando acerca de la forma o del comportamiento, sino acerca del contenido en nuestras mentes. Por consiguiente, Jesús explica acerca de la otra persona que “Su misma insistencia debería indicarte de que él cree que su salvación depende de tú hagas lo que él te pide. Si insistes en que no puedes satisfacer su deseo y experimentas de inmediato una reacción de oposición, es que crees que tu salvación depende de no hacerlo. Estás, por lo tanto, cometiendo el mismo error que él, y haciendo que su error sea real para ambos” (T.12.III.2:2,3,4). El contenido que Jesús nos está señalando es el error de creer que lo que hacemos o dejamos de hacer en el mundo es importante y está de alguna forma relacionado con nuestra salvación: “Insistir significa invertir, y aquello en lo que inviertes está siempre relacionado con tu idea de lo que es la salvación” (2.5).

Aunque Jesús sabe que el mundo no es real, él nos muestra cómo usar nuestras experiencias en el mundo para que sirvan de aula de clases y así podamos descubrir los errores específicos que estamos cometiendo en nuestro pensamiento, porqué ocurren y qué hacer acerca de ellos. El siempre nos está enseñando acerca del contenido en nuestras mentes y no de nuestro comportamiento. Sus enseñanzas serán siempre malentendidas si no tenemos en cuenta esta distinción. Por lo tanto, en el contexto de una negación categórica a hacer lo que otro nos pide, Jesús nos está diciendo que lo que nos ayudará a deshacer la separación y aprender que la salvación no tiene nada que ver con este mundo, es unirnos con la otra persona haciendo lo que aparenta ser “descabellado,” recordando por supuesto que, “...esto no significa que tengas que hacer algo que pudiera ocasionarte daño a ti o a él” (T.16.I.6:5).

Link al original aquí.